Monday, March 10, 2008

El 19 de abril

Aquella mañana cuando me levanté, tu mamá me miró y me dijo que ya habían comenzado las contracciones. No sabía si debería quedarme en casa o ir a tomar mi cuarto examen del doctorado. Al final nos decidimos por la segunda opción y en medio de los nervios, después de tres horas, pude escribir quince hojas sobre Mejía Vallejo que me servirían unas semanas después para pasar mi examen oral y definitivamente dejar atrás mis exámenes de doctorado. Tu mamá estuvo prácticamente todo el día con las contracciones y sólo hasta las once de la noche nos fuimos al hospital. Te vi nacer luego de tres horas, a las dos y cinco de la mañana. Estaba tan nervioso que sólo después de tres intentos pude cortar tu cordón umbilical para que los doctores pudieran comenzar a limpiarte. No te imaginás lo nervioso que estaba porque a mi lado derecho estaba tu mamá a quien estaban cosiendo, y vos, a mi lado izquierdo, estabas rodeado de médicos. Pensé que no estabas vivo, pero apenas orinaste a los doctores me di cuenta que estaba equivocado. Te envolvieron en una cobija blanca y te llevaron al cuarto donde tenían a los recién nacidos. Yo fui con vos y la enfermera. Cuando llegamos al lugar te pusiste a llorar, y yo te comencé a hablar, me miraste a los ojos (lo poco que los podías abrir), y te calmaste. Me sentí papá. Fue una sensación increíble, y que nunca imaginé sentir. Ese mismo día que naciste recibí una llamada de una universidad en la que me ofrecían un trabajo. El dicho que “cada hijo viene con un pan debajo del brazo”, se cumplió literalmente con vos. Hace un rato estabas llorando porque no te querías acostar, yo fui a tu cuarto, te cobijé y me acosté al lado tuyo y te calmaste. Me hiciste sentir la misma sensación de hace casi tres años. Me quedé un rato con vos disfrutando el momento, y apenas salía me dijiste, medio dormido ya, “te quiero”. Y por eso estoy acá, escribiéndote esto, porque yo también te quiero.

3 comments:

Letras goles y desvios said...

Bacano, bacano. Hay que abrirle la puerta a los sentimientos, la creatividad y la vida...
A.

Quimulá said...

Gracias por tus comentarios...todo esto de ser papá es una aventura y cada día te das cuenta que sabés menos.
Saludos,
Q.

Letras goles y desvios said...
This comment has been removed by the author.